28.11.2022 Dentro de la asignatura Creatividad, Acción y Servicio (CAS) del Bachillerato Internacional, los estudiantes tienen que realizar proyectos en favor de la comunidad.
Este proyecto CAS fue llevado a cabo por los estudiantes de II C Amalia Bordalí, Antonia Cuevas, Sofía Guzmán y Félix Westendarp, con el objetivo de mejorar la infraestructura del colegio para hacerla más amigable para los niños, a través de entregar un uso específico a un espacio que no estaba siendo bien aprovechado.
“Juegos interactivos”: hacer de tu espacio algo entretenido
El grupo continuó para este efecto con un proyecto heredado del año pasado, con el fin de convertir un pasillo del Preescolar en un espacio de juegos para que los niños se entretengan en los recreos. La acción concreta fue pintar en el piso un circuito con patrones y figuras coloridas que necesitan de una acción específica para ser atravesados.
“Nuestro objetivo era mejorar la infraestructura del colegio o hacerla más amigable para los niños, a través de darle un uso a un espacio que no estaba siendo aprovechado. Además nos propusimos desafiarlos con un recorrido innovador, para así mejorar sus habilidades motrices al incentivarlos a hacer diferentes movimientos como saltar, correr y girar. Por otro lado, también queríamos sorprender a los niños y alegrarlos, como los (compañeros) mayores lo hicieron con nosotros cuando éramos pequeños. Fue además una manera de traer vida a un espacio que antes era gris. Este trabajo nos ayudó a desarrollar principalmente dos aprendizajes CAS.
Por una parte, demostrar habilidades de trabajo en equipo y reconocer los beneficios del trabajo colaborativo, dado que si todos los integrantes no hubiesen cumplido con su parte, no podríamos haber terminado el trabajo a tiempo. Asimismo, aprendimos a planificar proyectos, ya que tuvimos que utilizar el método de la Carta Gantt. Esto nos facilitó el desarrollo del mismo, ya que contábamos con una base por la cual guiarnos y una estructura que seguir”.
Tras la ejecución de la pintura de las distintas figuras, los pequeños del Preescolar ya juegan con estos nuevos elementos. Acerca de ellos, los gestores manifestaron: “Como grupo hemos observado que los alumnos ya están utilizando nuestro proyecto durante los recreos, su disfrute es evidente y nuestros objetivos están siendo superados. No menos importante es que destacamos la gratitud de los docentes frente a nuestra intervención del espacio, su felicidad estuvo presente durante todo el desarrollo del proyecto. Como grupo nos complace haber despertado un espacio inutilizado y aportar al bienestar de la comunidad del Preescolar. El trabajo como equipo fue fructífero y placentero; sin duda construimos un producto a través de la fusión de nuestras habilidades y cada integrante desarrolló sus propias debilidades. Aspiramos a seguir realizando proyectos de este tipo y a seguir estimulando nuestras capacidades junto a nuestra institución”.